Mi ausencia podría llegar a justificarse...
Pero... ¿qué pasa con ustedes?
¿Por qué no me regalan ni siquiera un comentario?
Niños de la UTN: ¿Acaso ya les prohibieron tener contacto con los de la UBA?
Demás niños: ¿Están pensando ir a la UTN?

Por favor... No puedo más... Día tras día me meto en busca de vuestra compasión... y BLANCO...
Por favor... No puedo más...

¿Se deprimieron por el cierre del Diario Violín?
Yo también... pero tengo bastante material picante para darles aún...
Necesito motivación...
Un hola, un chau...
Un dejate de joder...
Un cortala...
Un esto sigue...
Un algo...
Por favor... No puedo más...

Tal vez no sean ustedes solos...
El mundo está loco...
Cosas raras andan pasando últimamente...
Por ejemplo, el otro día estaba por los aires (aunque no recuerdo muy bien qué hacía allí ni cómo llegué) y vi en el patiecito de una casa el trasporte del señor:

Ahora blogger me permite escribir por estos costados... En realidad podría, mediante HTML, pero ni en pedo...
Bueno, al respecto de la foto nada tengo que decirles, pero me parece bueno utilizar este espacio...
Queda como más entretenido, no sé...
Aprovecho todo el lugar que todavía queda para que alguien que me quiera ayudar me diga qué toqué de la plantilla del blog que hizo que se me vaya la barra del costado derecho a la mierda (está centrada, abajo de todo)...
Ahora los links de AdSense no se ven mucho...
Y esos giles me toman los clicks como impresiones de páginas, y no me quieren garpar ni unos centavos de dolar...
Pero estoy contento de que aceptaron el blog...
Hagan clic por las dudas... Despues reparto...
O podríamos usar esa plata para el asado próximo...


Volviendo con lo que les decía acerca de la locura general de la gente, el otro día fui a la casa de no recuerdo bien, y cada vez que entraba sacaba una foto... Miren lo que encontré:




Esa era la tía del dueño de la casa, y ese un primo o tío...

Uno de los dos no tiró la cadena del baño...

O hizo trampa en el chinchón...

O dejó una radio medio prendida...


Pero bueno...
Pasaron otras cosas más aburridas...
Lo que les quería decir es que por suerte, al finalizar la semana, vi algo que me comenzó a tranquilizar: